Iniciado como una broma, el Convertible Rojo representaba el sueño idealizado de una típica crisis de los 40’s: “Si no pude comprarme un convertible.. pues me lo hago!” fue la solución de Pau. Tras el éxito de este vino, llegó también su Convertible Rosa. En ambos trabaja con varietales que existen en los valles de Baja California pero que son poco apreciados– Ruby Cabernet en el Rojo, y Zinfandel en el Rosa.